Edificios ardiendo por doquier; desconocidos macabros en el sótano del vecino; votantes indecisos sacándole punta a sus lápices: Se podría decir que Cooler Returns de Kiwi Jr. es oportuno. ¿Pero en qué año estamos? En su segundo álbum lanzado internacionalmente por Sub Pop Records, Kiwi Jr. transita por los recientes cambios inesperados de la nueva década, echando otro vistazo a las fiestas de Año Nuevo olvidadas y a incendios misteriosos en cafeterías de pueblo, descifrando teorías conspiratorias de lo que nos espera para el 2021. Armado como un rompecabezas de mil piezas y ensamblado en un estado de creatividad a principios de la cuarentena, junto con el cantante esterilizado yendo al estudio esterilizado por medio de transporte público, usando mascarilla como si fuera el tipo de trabajo en el que el reconocimiento significaría ser asesinado, Cooler Returns se materializa como un estudio en crecimiento de los primeros obstáculos de la terrible década de los 20, una revelación investigativa de historia contemporánea escondida bajo los titulares y reyes antiguos enterrados bajo estacionamientos.
No mucho después de su debut Football Money en tiempo arqueológico, pero hace eones interminables en tiempos de cuarentena, el grupo canadiense espiritualmente antípoda, Kiwi Jr., regresa para diseminar el reporte anual a sus accionistas, enterrando los números inculpatorios en los apéndices infinitos de la narrativa del álbum.
La primera canción, «Tyler», construye un monstruo de Frankenstein de todos tus ex novios músicos—¿no recuerdas cómo «te derrumbabas en el camerino mientras se tomaban el licor de los artistas de cabecera» («…Falling apart in the green room while they drank half the headliner’s rider»)? En «Waiting In Line», aún estamos dormidos en el bar, la agitación disparándose mientras se contempla «qué tipo de bestia protege la puerta trasera» («What breed of beast protects the back door»). Escuchamos que «aún no es el pasado hasta que arda» («It isn’t past until it burns»), en «Maid Marian’s Toast», ¿pero cómo se explican los incendios de cafeterías canadienses? Estos serán investigados por el departamento de incendios provocados de Kiwi, sospechando de todos: El Cocinero, La Clienta Regular (la Sra. Scarlett), el Coronel Mustard. A través de estas crisis, historias y juegos mentales, Kiwi Jr. no espera que tomen notas o que revisen las fechas, y después, cuando en «Omaha» demandan evidencia de que Woodstock haya realmente sucedido, quizá el ritmo despreocupado de la guitarra nos dice todo lo que debemos saber sobre quién ha estado revisando los archivos del festival, tarareando por toda la colección de 10 discos. Estas historias son fáciles de escuchar gracias al cambio que hizo la banda de un sonido crujiente a un sonido suave para el 2021. El ritmo cavernícola de Football Money ha sido pulido con el sonido purificador de un piano de taberna, ráfagas de órganos, y una harmónica fresca.
Kiwi Jr. le canta a una audiencia atorada en sus casas, haciendo que cualquier otra distracción parezca aburrida, y al final solo queda la composición para entregarle cuentos atractivos a la población, justo como se hacía en los viejos tiempos. Kiwi Jr. llega al 2021 con una onda cerebral dominada que viene tanto de la trastienda de la disquería como la banca de castigo de hockey. ¿Y cómo nos despedimos de los novatos, los indecisos, los inestables, los desapercibidos? ¿»Mejores deseos», «saludos cordiales», «buena suerte»? ¡No! ¡Con Cooler Returns!
Cooler Returns de Kiwi Jr., presentando la canción que le da el título al disco, «Undecided Voters», «Maid Marion’s Toast» y «Waiting In Line», estará disponible el 22 de enero, 2021, internacionalmente por Sub Pop, con la excepción de Canadá donde se lanzará bajo el sello de la banda, Kiwi Club. El álbum fue producido por Kiwi Jr., mezclado por Graham Walsh (Metz, Bully, Preoccupations) en Toronto, y masterizado por Phillip Shaw Bova en Bova Labs de Ottawa, Ontario.
Kiwi Jr. es Jeremy Gaudet (voces, guitarra), Brohan Moore (batería), Mike Walker (bajo), y Brian Murphy (guitarra).